QUIERO DEJAR DE SENTIR QUE ME PASO EL DIA TRABAJANDO, O CÓMO HACER MÁS COSAS QUE ME GUSTAN

Piensa a qué dedicas todas las horas que tiene el día. Si las 24h del día fueran el 100% del tiempo, ¿Qué porcentaje de ese tiempo emplearías en lo que realmente te gusta, te relaja, te agrada, te divierte, te ayuda a estar feliz?.

Vivimos en una sociedad en la que el estilo de vida está totalmente condicionado por las largas jornadas laborales, muy difíciles la mayoría de ocasiones de compaginar con una vida personal y/o familiar. Habitualmente no tenemos suficiente tiempo de sueño y descanso, y tendemos por lo tanto a sacrificar tiempo libre para llenarlo de actividades que son responsabilidades: continuar trabajando, tareas de casa, gestiones, cuidado de otros miembros de la familia, etc., o bien en otros casos ese tiempo libre lo acabamos ocupando durmiendo para poder descansar los suficiente para no empezar el próximo día agotado.

Este estilo de vida genera impacto negativo en nuestro organismo, a nivel hormonal y fisiológico especialmente. Para explicarlo de una forma sencilla: se reduce la producción y liberación de sustancias en el cerebro y torrente sanguíneo, que son las que nos hacen estar felices, y se aumenta la liberación otras sustancias, que dañan a medio plazo el funcionamiento normal de diferentes partes del organismo. Simplificando, esto se traduce en que este estilo de vida potencia el estrés, la ansiedad y la tristeza.

Queremos indicarte algunos remedios y pautas para paliar los efectos del estilo de vida imperante especialmente en las ciudades:

• Reduce horas de trabajo: fácil de decir, pero a veces no es posible hacerlo. Márcate como objetivos restringir la cantidad de tiempo que dedicas al trabajo, tanto haciendo cosas del trabajo como PENSANDO en cosas del trabajo. Pensar en cosas del trabajo, también es trabajar. Si no te es posible, lee el siguiente remedio:

• Incorpora elementos agradables en tus responsabilidades: aumenta descansos en el trabajo, y hazlos más satisfactorios. Es decir, en vez de comer frente al ordenador, vete a tu restaurante favorito, desconecta de la oficina. En vez de tomarte un descanso con tus compañeros en la sala contigua hablando de trabajo, sal del edificio, respira otro aire, cambia de entorno, y habla de otras cosas más divertidas. Si es necesario, con otra gente. Cuando tengas que llevar a los niños a sus actividades, o tengas que ponerte a limpiar, hazlo escuchando tu podcast favorito, o la música que más te motiva. Mete actividades agradables mientras haces las cosas que TIENES que hacer, y no las que QUIERES hacer.

• Aumenta la calidad (sobre todo si no puedes aumentar la cantidad) del tiempo libre que tienes: aprende una disciplina nueva de algo que te guste, haz todos los días algo de lo que verdaderamente te apetece, practica contemplar y estar en el momento presente unos minutos al día, estando inmerso en algo que te guste, ya sea estar en el sofá, mirar el paisaje que tienes por la ventana, observar en un banco del parque de al lado de tu casa como pasa la gente, como se mueven las hojas de los árboles, etc.

• Practica el autocuidado: es preferible, sobre todo si lo disfrutas, que dediques más tiempo a echarte una crema, darte un baño caliente o una ducha fría, o te hagas la cena que más disfrutas, que poner lavadoras, recoger lo que está por en medio en casa, o terminar de mandar ese email que tienes pendiente. Es decir, si tienes que elegir porque no tienes tiempo de todo, elige la actividad que fomenta tu autocuidado. Lo otro puede esperar.

Los psicólogos trabajamos por mejorar la calidad de vida que tienen las personas, concienciándolas y ayudándolas a cambiar determinadas rutinas y hábitos, además de pensamientos y emociones, que en definitiva mejoren su salud mental.

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